Curso de chino: ¿cómo afrontar el estudio de esta lengua extranjera?
Desde hace un tiempo China está adquiriendo una importancia destacable en la escena internacional gracias a su crecimiento económico, lo que para muchos ha sido suficiente para comenzar a referirse al chino mandarín como “idioma del futuro”. Los números no engañan: el chino es la lengua más hablada a nivel mundial con un total de 1.284 millones de hablantes, muy por encima del español (437 millones) y el inglés (372 millones).
Los cursos de chino subvencionados son una opción recurrente de viajeros, estudiantes, hombres de negocio o personas interesadas en ascender en el competitivo mundo laboral. China es un centro neurálgico de operaciones comerciales por lo que el conocimiento de este idioma puede abrir las puertas de gran cantidad de trabajos.
También hay quienes estudian esta lengua extranjera conmovidos por la interesante, fascinante y milenaria historia cultural de este país asiático. Sin ninguna duda, es una cultura singular y atractiva capaz de seducir a cualquier persona.
Existe un tópico muy extendido respecto a la gran dificultad que supone estudiar chino. Sin embargo, no es una tarea imposible siempre que queramos invertir tiempo, dedicación y esfuerzo, como en cualquier otro aspecto de la vida. Si tenemos la motivación suficiente y disponibilidad de tiempo podemos conseguir comunicarnos con relativa fluidez con esta lengua.
Cada vez más extranjeros hablan chino y la gente poco a poco se está quitando el miedo de estudiarlo. Eso sí, debemos ser conscientes de las mejores alternativas para profundizar en este idioma. Un curso de chino elemental puede ser un gran comienzo. A continuación, te detallamos una serie de premisas para que encares el aprendizaje de este estudio del mejor modo posible.
Los consejos para abordar un curso de chino
- Adopta una actitud apropiada
El tiempo que se debe destinar para tener un nivel aceptable de chino es considerable. Ante esta situación, debemos tener presente lo que tenemos por delante para no tirar la toalla al poco de comenzar. Es conveniente encarar el estudio con una buena actitud, desprenderse de los malos hábitos y organizarse bien todas las obligaciones para llegar a tiempo a todo mientras añadimos el chino en nuestra planificación semanal.
- No existen los milagros
¿Aprender chino en dos días? ¿Por Youtube? Los milagros no existen, y menos cuando hablamos de estudiar una lengua extranjera como esta. Debemos cursar formaciones que prometan un aprendizaje correcto mediante un buen número de horas lectivas, teniendo en cuenta el tiempo para el estudio y para la práctica. Requiere un tiempo aprender caracteres y lecciones hasta que se consigue cierta metodología, por lo que mejor tener paciencia y no crearnos falsas expectativas.
- Motivación personal y profesional
Un extranjero que sabe hablar chino demuestra capacidad de sacrificio y perseverancia que, aparte de la misma competencia con este idioma, también son grandes motivos para postular con éxito por un puesto de trabajo. La motivación profesional, no obstante, no lo es todo. Una persona debe encontrar motivaciones personales, culturales o humanísticas que bien valdrán todo el esfuerzo que se realice.
- Constancia y paciencia
Los resultados que evidencian un domino claro del chino tardan un tiempo en llegar. Si alguna vez has tenido que afrontar alguna otra tarea que exija un nivel similar de constancia, será fácil para ti porque podrás adoptar la misma filosofía. Y como mencionábamos anteriormente, se paciente: primero, para la parte de la pronunciación, audición y caracteres; y después para la fase de práctica del idioma.
- Estudio como rutina
Los cursos subvencionados de chino acelerarán nuestro aprendizaje, pero no podemos quedarnos solo ahí. Debemos introducir el chino dentro de nuestra rutina y cada día o semanalmente dedicarle un tiempo. No se puede correr una maratón sin entrenar cada día.
Nunca es tarde para dar los primeros pasos en esta lengua. No tengas dudas en empezar tu camino si de verdad tienes interés por emprenderlo. Todo esfuerzo tiene su recompensa y viajar a Pekín o Shanghai y poder defenderte mínimamente con el chino deber ser una sensación gratificante.