Por qué y para qué necesito un curso de manipulador de alimentos
Llega el verano y con ella una importante campaña de contrataciones para el sector servicios, lo que implica la posibilidad de poder desarrollar nuestro trabajo en hostelería, restauración, gastronomía, etc.
Para el desarrollo de absolutamente todos estos trabajo es necesario por ley (concretamente por el Real Decreto Ley 202/2000) disponer de la certificación adecuada que acredite que conocemos todos los procesos, desde la preparación hasta el servicio, de higiene y cuidado para que su manipulación no suponga ningún tipo de peligro al consumidor final.
Por ello, es de obligado cumplimiento disponer de un certificado de manipulador de alimentos pero, ¿para qué más nos sirve un curso subvencionado de manipulador de alimentos?, ¿qué puedo obtener de él más allá de su valor como permiso laboral?
Para qué me sirve un curso de manipulador de alimentos
En un curso de manipulación de alimentos, lo primordial que se enseña es a inculcar una serie de rutinas y pautas de higiene a la hora de tratar con alimentos con el objeto de prevenir daños en la salud de los consumidores.
Y es que tanto durante el preparado, fabricado, cocinado, elaboración, envasado, transporte, almacenamiento o distribución, venta, suministro y/o servicio de los alimentos, se puede producir una propagación y/o crecimiento de bacterias que produzcan intoxicaciones alimentarias, mucho más en este tiempo en el que la exposición al calor, fomenta su proliferación.
Por ello, toda persona encargada de entrar en contacto con los alimentos, debe conocer de cada uno de ellos cuál es el estado óptimo de protección y conservación, así como los protocolos de higiene adecuados (uso de guantes o protectores, desinfectantes, conservación adecuada en frío o a la temperatura adecuada…).
Por qué necesito un curso de manipulador de alimentos
Primero por su obligatoriedad, que más allá de lo marcado por la ley, asegura que ningún empleado va a poner en peligro la corrección y el buen hacer de toda empresa que se encargue al servicio alimentario.
Por ello, para los siguientes trabajos entre otros se te solicitará disponer del carnet de manipulador:
- Trabajos de procesado de alimentos: carniceros, charcuteros y pescaderos.
- Trabajos de preparado y servicio de alimentos: cocineros y camareros.
- Trabajo de manipulador de alimentos: reponedores y dependientes.
En todos estos casos, disponer del carnet de manipulador de alimentos previa formación en curso especializado, supone una garantía y una excelente disposición de cara al contratante que verá en el aspirante una total profesionalidad al respecto.
5 consejos y buenas prácticas a la hora de manipular alimentos
- El jabón neutro tu mejor aliado: incluso cada vez que vayas a cambiar de elaboración o manipulación, ten a mano desinfectantes no agresivos.
- Trata adecuadamente los productos congelados: la congelación está muy presente en la manipulación de los alimentos al asegurar su perfecta conservación. Pero para que ésta no se pierda una vez se descongele, debemos completar su procesado o cocinado dentro de las dos horas siguientes y comenzar la descongelación en el frigorífico, nunca a temperatura ambiente o con focos de calor que no correspondan al cocinado.
- Al cocinar, ojo con la temperatura: cada tipo de alimento necesita una temperatura adecuada que asegure la total eliminación de toda bacteria o sustancia orgánica contaminante. Las carnes de res, cerdo, pollo, pavo, ternera y cordero necesitan un mínimo de 160º y un máximo de 180º según se traten de despieces o partes enteras.
- Limpia todo lo que toque lo crudo: todo plato o tabla donde haya estado carnes, aves, pescados y mariscos en crudo no debe entrar en contacto con otros alimentos hasta que se haya desinfectado la superficie correctamente.
- Limpia todo tras el proceso: los utensilios y superficies usadas para manipular alimentos debe ser totalmente desinfectados una vez acabemos con su uso. Para ello, mucho mejor si usamos materiales desechables (como las toallas de papel) que paños y trapos, que deberían ser lavados constantemente.